La mujer de Uganda (África Oriental) ha tenido 4 mellizos, 5 trillizos y 5 cuatrillizos y sólo una vez ha dado a luz a un hijo único.
Mariem Nabatanzi tenía 44 hijos a la edad de 40 años.
Sus médicos le informaron que ningún método de planificación familiar era adecuado para ella.
Mariem Nabatanzi tenía 44 hijos a la edad de 40 años.
El extraño mecanismo del cuerpo de la madre
Mariem se casó a los 12 años después de que sus padres la vendieran. No mucho después, quedó embarazada y dio a luz a su primer hijo a la edad de 13 años. Actualmente, sus 6 hijos han muerto y su esposo se ha ido con todo el dinero de la familia, dejando a Mariem con 38 hijos, 20 niños y 18 niñas.
Pero Mariem, apodada " Mamá Uganda" en su ciudad natal, pronto se dio cuenta de que no era como otras mujeres. Cuando se vio constantemente dando a luz a mellizos, trillizos y cuatrillizos , fue al médico. Los médicos dijeron que tenía ovarios anormalmente grandes, lo que provocó la inflamación de las trompas de Falopio.
Le dijeron que los métodos anticonceptivos no funcionarían y podrían causar serios problemas de salud . Los tratamientos son difíciles de conseguir en las zonas rurales de Uganda.
La difícil vida de una madre
El esposo de Mariem Nabatanzi la dejó y se llevó todo el dinero de la familia con ella. Mariem hizo todo lo posible para mantener a sus hijos, desde peinarlos, recolectar sobras, hacer ginebra casera hasta vender hierbas medicinales.
Todos sus hijos son de su ex esposo, quien la dejó en 2016, el mismo año en que dio a luz a su hijo menor. Uno de los hijos de Mariem dijo que su madre era una "héroe".
Actualmente, Mariem y sus padres viven en cuatro casas estrechas hechas de bloques de cemento con techos de hierro corrugado en un pueblo rodeado de cafetales a 50 km al norte de la capital, Kampala.
Una " mujer amable" les dio algunas literas a sus hijos después de que su esposo se fue, dijo. Pero sigue siendo bastante estrecho, con 12 personas en 1 dormitorio y 2 personas en un colchón.
Hablando de su exmarido, Mariem confiesa: “Crecí llorando. Mi hombre me ha causado mucho sufrimiento. Todo mi tiempo lo paso cuidando a mis hijos y trabajando para ganar algo de dinero”.
Todo el dinero que gana lo gasta inmediatamente en comida, ropa, tratamiento médico y la matrícula de los niños. En una pared de la casa cuelga con orgullo fotos de algunos de sus hijos cuando se graduaron de la escuela.
Su hijo mayor, Ivan Kibuka, tiene 20 años y se vio obligado a abandonar la escuela secundaria cuando su madre ya no puede pagarla. “Mamá es muy dura” , dijo: “El trabajo me está aplastando. La ayudamos con cosas que podemos, como cocinar y lavar, pero todavía tiene que llevar a toda la familia”.
Los pequeños cachorros de Mariem Nabatanzi.
La ciencia es impotente
Los médicos dicen que es fértil y que ningún método de planificación familiar es adecuado para ella. El parto era la única forma de “calmar” el cuerpo de Mariem .
Según la Clínica Mayo, una compañía médica privada de EE. UU. con oficinas en todo el mundo, "el síndrome de ovario grave es poco común pero puede poner en peligro la vida".
Otras complicaciones pueden incluir acumulación de líquido en el abdomen o el pecho, coágulos de sangre, insuficiencia renal, torsión ovárica o problemas respiratorios.
Según el Dr. Charles Kiggundu, ginecólogo del Hospital Mulago en la capital de Uganda, Kampala, la causa de la enfermedad puede ser genética .
"Su caso es una predisposición genética a la ovulación, la liberación de múltiples óvulos en un ciclo, lo que aumenta enormemente las posibilidades de nacimientos múltiples " .
